Sardina o Salmón

¿Si pudieras elegir qué tipo de pez ser, cual serias, sardina o salmón?

Ambos son ricos en omega, proteínas y nutrientes, son agiles y son peces. El punto que hoy tratare, es si decides ser sardina o salmón.

Las sardinas nadan en cardumen, por lo general en uno donde todos tienen las mismas características para con ello pasar inadvertidos frente a sus depredadores; recuerdan la escena de buscando a Nemo donde cientos de peces hacen una flecha, señalando el camino que Dory y Marlín deben seguir para encontrar a Nemo, ese es un cardumen.

Los salmones, igualmente inician su viaje en cardumen, cuando es el momento de desovar, nadan del océano hacia río arriba, para llegar al mismo lugar donde ellos nacieron. En ese trayecto, el número de ellos se va reduciendo drásticamente, y después de un proceso de mucho esfuerzo y podría decir dolor, ellos desovan y mueren.

La comparación que hago con nosotros, los humanos es la siguiente:

Las sardinas nadan en montón sin tener un objetivo específico y las encuentras a precios accesibles; el salmón en cambio, no tiene un precio accesible ni lo venden enlatado por montón.

Quieres ser en tu vida: ¿una sardina que no se distingue de las demás?, ¿una de esas que en cualquier lugar las encuentran, y que por lo mismo son fáciles de sustituir por una igual? O ser un salmón, ágil. Un guerrero, que lucha por alcanzar un objetivo, que aunque parezca ilógico nada contra corriente para lograrlo.

La vida es una aventura, llena de pruebas, llena de momentos de crecimiento. Es en esos momentos, cuando decidimos si seguimos siendo sardinas o saltamos y nos estiramos. Corremos el riesgo de rompernos, pero también el privilegio de transformarnos y crecer.

Podemos elegir ser de los que viven en crisis constantemente, en modo víctima, o ser de ese cardumen que disfruta la vida, sorteando obstáculos y preguntándose cuando estos aparecen; ¿Cómo puedo darle la vuelta a esto? ¿Cómo puedo crecer con esto que hoy se presenta ante mí?

Elegir lograr tus objetivos o no es únicamente tu decisión, no vayas por ahí, haciendo responsable a los demás de tus resultados, pues son tuyos.

Muchas veces llegar a ser salmón requiere de enormes dosis de confianza y fe en uno mismo, se un salmón en tu vida, en tu trabajo, en tu familia y en tu entorno.

Te dejo estos tips para lograr tus objetivos.

• Centra tu atención en como abrir nuevas puertas y no en las que ya se cerraron.
• No ignores la realidad, pero piensa de forma positiva ante ella.
• Usa las palabras para crecer y mejorar.
• Establécete objetivos a corto y largo plazo, por difícil que parezcan, nadar contra corriente, tendrá su recompensa.
• Aprende de tus resultados, solo así te será factible rectificar, y lograr tus objetivos

Finalmente te recuerdo; quien algo quiere, algo le cuesta.

yadirapedrero@outlook.com

 

 

febrero 24, 2015 by yadirapedrero Categories: Uncategorized Deja un comentario

LAS 4 PATAS DE TU MESA

No, no escribo de una mesa, de esas tan útiles para poner los alimentos o desarrollar tareas, escribo sobre los cimientos de tu ser. Particularmente mencionare cuatro, es posible que al terminar de leer, descubras que hay más “patas en tu mesa”, lo importante es saber tener el equilibrio entre ellas, y esta parte, al menos para mí; es la más complicada.

Hace días me tocó ver a alguien estresado en una cena pensando en hacer algunas cosas que le habían quedado pendientes del trabajo, sin disfrutar del hecho de estar reunido con personas que podrían aportar interesantes cosas a su vida, y me quede pensando, ¿Cuánto de mí se refleja en esa persona, cuanto de lo que él vivía en ese momento vivimos todos a diario?

¿Cómo le hacemos para equilibrar, familia, pareja o amigos, salud y hobbies con el trabajo sin morir en el intento?

En esta nueva dinámica de vida, en donde si no corres te alcanzan y te rebasan, equilibrarnos es una tarea titánica.

La mayoría coincide que: Familia, amigos, salud, hobbies y trabajo; son los cimientos más importantes en su vida, si lo son, mi pregunta ahora es ¿Porque de repente nos centramos solo en uno, o quizá en dos y los demás los descuidamos?

Al enfocarse en uno de ellos más que en otros, empezamos a perder el equilibrio y por ende empezamos a tener problemas, ausencias o rupturas con los demás cimientos de nuestro ser.

¿Cuántas veces prometes ir a un lugar con familia o amigos y a última hora un encargo laboral se atravesó entre ustedes?

¿Cuántas si podías ir, pero preferiste “trabajar” para no sentir que fallabas en el trabajo?

Conseguir el equilibrio debe ser una tarea que nos deje satisfechos, no es fácil, pero intentar día a día lograrlo nos hará sentir mejor.

Decidir equilibrar, los cimientos es cuestión personal, decidir cuál de ellos es prioritario y estar dispuesto a pagar los costos también.

La cuestión laboral en gran parte afecta a los demás cimientos, pero se puede lograr el equilibrio, solo es cuestión de decisión, compromiso y porque no; “maña”

Te dejo algunos tips para empezar a internarlo.

• Planea tus actividades laborales, prioriza tus tareas logrando optimizar tu tiempo.
• Dedica parte de tu día a ti; haz lo que te guste: leer, caminar, meditar o entrar al cine solo vale la pena, es tu espacio y la forma que puedes contactar de nuevo contigo.
• Establece límites, el trabajo siempre existirá pero tus relaciones personales pueden dañarse y no recuperarse.
• Descansa de los dispositivos móviles, proponte apagarlos llegando a casa; en este punto estoy en el intento, no me es tan sencillo como pensé, pero lo lograre.
• Ten un día a la semana para ti y tu familia o pareja.
• Agenda una o dos veces al mes reunirte con tu círculo de amigos, siempre es bueno estar cerca de quienes estimas. Este tiempo es sagrado, si no puedes ir, discúlpate pero no cambies los planes del círculo.
• Finalmente inténtalos un día y otro también, suma más a la lista y ve descubriendo cómo te sientes mejor, al cambiar tú lo demás en consecuencia se mueve.

Comparte que sueles hacer para equilibrar.

 

febrero 16, 2015 by yadirapedrero Categories: UncategorizedTags: amigos, equilibrio, pareja, stress, tiempo, trabajo Deja un comentario

EGOISMO DEL SABER

Seguramente te has topado con personas que son expertos en alguna actividad, o tienen desarrolladas habilidades de una manera impresionante. Son personas a las cuales, en algún momento, uno se les acerca, para pedir asesoría y sucede que te topas con pared. Son Impenetrables, escurridizos, evasivos o egoístas.

Vendrán a tu mente recuerdos de tu primer trabajo o escuela, en donde seguramente escuchaste muchos: “no sé cómo se hace” en un tono tan irónico que tus oídos sangraron, “aprende tu solo”, “a mí nadie me ayudo “,“por ahora no puedo decirte como, estoy ocupado”, “lo vemos más tarde” y “ese” tarde nunca llego.

Es bien sabido, que el conocimiento se obtiene con estudio y la sabiduría con la experiencia, pero la mayoría de las veces nos cuesta compartir esa sabiduría con los demás, ya sea porque se ve como futura competencia o simple egoísmo, pero nos negamos a compartirla. Nos negamos, a pasarla a las nuevas generaciones que vienen como coloquialmente se dice empujando.

Ese no compartir, ese egoísmo, no nos hace crecer como personas, ni como sociedad, muchos piensan que al compartir lo que saben, perderán el control, que serán desplazados o que nadie mejor que ellos hará bien las cosas.

Debido a ese egoísmo nuestro legado como formadores se pierde no crecemos, se paralizan las cosas, se congelan asociaciones, se pone pausa a negocios y laboralmente es una causa del incremento en la rotación del personal.

No compartir no te hace poderoso, ni una persona apreciada, recuerda que uno debe aprender, para poder enseñar y con ello crecer.

Compartiendo es la única forma de lograr un mundo mejor, es necesario que más personas aprovechen lo que tienen a su disposición, regalando sabiduría habilitamos a los demás a ser autosuficientes, una vez que cada individuo la tiene el éxito del mismo depende del esfuerzo de cada uno de ellos, como dice la frase; no le des pescado a alguien, mejor enséñalo a pescar.

Te dejo estos tips de por qué compartir es genial:

1. Al compartir, no divides, multiplicas
2. Todos tenemos algo que compartir, sin que esto afecte nuestro trabajo.
3. Compartir no cuesta, al contrario enriquece.
4. La gente habla bien de quienes comparten su sabiduría.
5. Compartir, permite que tu legado perdure en otra persona
6. Compartir te hace mejor ser humano.
7. Compartiendo haces autosuficientes a los que te rodean.

febrero 10, 2015 by yadirapedrero Categories: UncategorizedTags: amor, compartir, sabiduria 4 comentarios

SI, PERO NO ( dices sí, pero piensas que NO)

• ¿Aceptas ir a una fiesta que no quieres asistir?
• ¿Tú amiga (o) te pide que lo acompañes y dices si, sin tener ganas de ir?
• ¿Te piden un favor y aun sin poder hacerlo, dices si?
• ¿Por no quedar mal en la oficina o equipo de trabajo de la escuela, dices:” yo me encargo”, teniendo ya responsabilidades asignadas?

¿Cuántas veces te has sentido abrumado (a) por decir si a todo?, sin encontrar la salida o quedando mal con familia, amigos, trabajo y todo por no querer o poder decir NO.

No, es esa pequeña palabra de solo dos letras que pronunciarla es tan difícil. Vamos por la vida, diciendo si a todo, quedando bien con todos, pero con saldo negativo para nosotros. ¿Te has puesto a analizar, cuantas ocasiones terminas haciendo cosas que realmente no deseas o no tienes el tiempo para hacer?

Decir NO a realizar un favor, trabajo o encargo, no debe ser tomado como una actitud egoísta, por alguna razón que seguramente tú identificas, negarse aun en los casos que nos conviene o estamos convencidos, nos cuesta trabajo.

Decir NO, es un derecho y no debemos sentirnos mal por decirlo, pues una decisión que tomamos y de la cual estamos seguros.

Tan necesario es decir sí, como aprender a decir No, para decirlo, debes perder el miedo de quedar mal ante los ojos de los demás, de ser excluido y de ser visto como una persona no solidaria o buena.

Te comparto tips para empezar a poder decir No sin “morir” en el intento:

1. PON LIMITES: solamente tú conoces que estás dispuesto a hacer y hasta donde, clarificar tus limites te empoderan y facilitan decir No.
2. DI NO, CON CONVICCION: date cuenta que está bien decir No, sin importar a quién le estés hablando, aprende a decirlo de tal forma que la otra persona lo entienda y acepte, es tu derecho.
3. SE ASERTIVO: manifiesta tu convicción y defiende tu derecho de manera congruente, consciente y directa, comunica tu sentir sin herir.
4. DI NO, SIN CULPA: disfrazar tu No con expresiones como: quizá, tal vez, no te ayudan mucho, simplemente di No, no te confundas ser generoso no es sinónimo de decir si a todo.
5. DI NO, SIN EXCUSAS Y DE FORMA EDUCADA: no tienes por qué justificar tu decisión, solo exprésala de manera calmada y manteniendo la situación controlada.

Finalmente si alguien cuestiona tu No; simplemente responde: “siento decepcionarte, pero mi propósito este año es mejorar mi habilidad para decir No”.

febrero 3, 2015 by yadirapedrero Categories: Uncategorized Deja un comentario